El presidente del TSJA, Augusto Méndez de Lugo, ha sido acusado en una denuncia presentada el pasado 17 de marzo ante un juzgado por un funcionario de la Audiencia de Ceuta, como autor responsable de frenar un procedimiento penal en el que se juzgaban posibles delitos de “prevaricación, falsedad, coacciones y contra la integridad moral”.
Según afirma en su denuncia en funcionario Juan Ignacio Sagardoy Moreno, ha sufrido persecución por parte de la Secretaria de Gobierno del TSJA en Ceuta, Josefa Vilar Mendieta, a la que en su día le ganó una plaza en propiedad, permaneciendo la Sra. Vilar en Ceuta en virtud de un cargo efímero y político como es el de Secretaria de Gobierno, la máxima representación de la Justicia en Ceuta. Pues bien, tras haber salido airoso de los tres expedientes abiertos contra él, el funcionario supuestamente agredido presentó denuncia por la vía penal para defenderse de la ola de expedientes que, de momento, iban quedando nulos o archivados por las mas altas instancias, decisiones que invitaban a pensar en un descarado acoso para que el funcionario abandonase la plaza que ella un día pretendió y perdió en buena lid.
Escribe que la denuncia ha sido archivada por el juez encargado del caso, Andrés Carreño, tras recibir la llamada de Méndez de Lugo al que, de paso, también le pidió que no secundase la huelga de jueces. Pone por testigos a los jueces que asistieron a una reunión, “en esa reunión se comentaron los hechos que ahora se denuncian, por lo que señalo como testigos de la veracidad de mis palabras a todos los asistentes a la misma”. El juez Carreño no asistió ya que, tras la llamada de Méndez de Lugo, archivó el caso, fue hospitalizado y no hizo huelga, cuenta en la denuncia.
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