LA LLAVE
Manuel Chaves, Gaspar Zarrías y Luis Pizarro, están convencidos y empeñados en que Plata se convierta “ desde ya” en candidato, en un referente político que saque a Marbella del túnel. La fórmula del invento es simple: figura de nivel como Plata ( no tienen a otro) y gobiernos con las siglas del PSOE en Málaga, Sevilla y Madrid. Y además un arma de gran influencia local como las competencias en urbanismo, la llave del futuro de Marbella. En una palabra, que si la alcaldía de Marbella es socialista Manuel Chaves devolverá urbanismo el año que viene. Por el contrario, si Ángeles (Titi) Muñoz es la alcaldesa, prevalecerá el criterio legalista anunciado por la consejera Gutiérrez del Castillo de retener las competencias durante un lustro.
TITI MUÑOZ SUBE
Pero ni con esas dicen las encuestas que ganaría el consejero las elecciones. Los encuestados no le conocen y tanta resistencia, desde hace tres meses, está deteriorando su imagen convirtiéndole en un “candidato a palos”. Una circunstancia que está sabiendo aprovechar Ángeles Muñoz y el PP, cuya precampaña comenzó al día siguiente de la toma de posesión de la gestora. Una labor que empieza a serle reconocida por las encuestas y que tiene de los nervios a media cúpula socialista. Una derrota del PSOE en Marbella supondría, además, verse responsabilizado por el electorado de lo sucedido en Marbella estos quince años.
Tanto mensaje cifrado entorno a lo de Marbella tiene su explicación con solo aplicar el sentido común, no el del deber. Plata, claramente incómodo por tanta prisa y tanta presión, ha puesto condiciones importantes para dar el “sí” definitivo. Se trata de aceptar por parte de Chaves y el PSOE el diseño de un proyecto integral para Marbella y la Costa del Sol, en el que Plata sería el coordinador político delegado con plenos poderes políticos. Un plan en el que el diseño urbanístico y las obras públicas, AVE incluido, serían la columna vertebral. El consejero pide tener mando en plaza y no parece que sea fácil que Chaves pueda acceder a sus pretensiones. He ahí el gran problema, el choque frontal entre quiénes diseñan en Sevilla idílicos planes territoriales desde la consejería de Obras Publicas, o los ferrocarriles del futuro desde Madrid, frente a la cruda realidad de los parámetros de la economía y el empleo en Marbella y la Costa del Sol, el escenario al que mandan a Plata.
LA TRANSFERENCIA
Una transferencia bancaria de 1.600 millones de pesetas desde una cuenta de la que eran titulares Juan Antonio Roca, la familia Gil y Jose Ávila Rojas sirvió para descubrir el entramado económico que dio paso a la operación Malaya. Aquella transferencia, aparentemente blanca, ya que la cuenta de destino era del ayuntamiento de Los Alcázares en Murcia, por la licencia para un parking subterráneo bajo una plaza pública, supuso un grave error del clan. Debieron ser las prisas. Nunca antes habían realizado pagos por transferencias bancarias que dejan huella, siempre pagaron con billetes morados. Ese fue el error que posibilitó a la Guardia Civil y Policía rastrear con qué otras cuentas bancarias se comunicaba la de la transferencia. El resultado fue espectacular, se habría llegado a cuadrar el entramado real de los autores materiales del saqueo de Marbella durante la última década. Corría el mes de noviembre de 2005.
SISMOGRAMAS
Uno. En el PSOE, alarmados, dan por hecho que Soledad Becerril será la candidata del PP en Sevilla. Ella lo desmiente.
Dos. Esta semana podría romperse el gobierno de coalición que sustenta al socialista Antonio Barrientos en el ayuntamiento de Estepona.
Tres. El PP pregunta por la adjudicación municipal de la sede del que fue consulado de EEUU en Sevilla a la fundación en memoria del cazador Valentín Madariaga durante 50 años sin alquiler.
1 comentario:
A mi parecer el último empujón que necesita el señor Plata es poder "inmolarse" políticamente al estilo Nono Amate, es decir, sin que el estómago se resienta...
Si pierdo nada de hacer oposición, a seguir viviendo de la Junta.
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